En mi trabajo tengo la suerte de aprender cada día, después de cada sesión de cada entrenamiento me quedo reflexionando, formulándome preguntas y buscando respuestas.

¿Por qué ante un mismo hecho, las personas actúan de forma tan diferente?, ¿por qué algunas personas son capaces de superar la adversidad y otras no?. ¿ Qué habilidades se necesitan?, ¿se pueden entrenar?

Me viene a la cabeza una fantástica cita de Marco Aurelio “ La sabiduría es el arte de aceptar aquello que no puede ser cambiado, que cambiar aquello que puede cambiarse y , sobre todo, conocer la diferencia”.

Todo se puede entrenar, también la fortaleza emocional. Esta es una de las grandes responsables de que seamos capaces de reponernos ante las dificultades, ante la adversidad.

La fortaleza emocional es un mecanismo psicológico que te facilita y te ayuda a tener el control de tu vida, a ser capaz de tomar tus propias decisiones, a gestionar mejor los conflictos, las decepciones. En definitiva una vez más a tener el control de tu vida.

Una de las primeras conclusiones a las que llegan los expertos en psicología es que no es tan importante lo que te ocurre sino la reacción que tienes frente a lo que te ocurre.

Las personas que son emocionalmente fuertes están menos limitada por su entorno, por los hechos que le acontecen. Son personas más capaces de gestionar la incertidumbre, de tomar buenas decisiones en momentos duros, de superar su miedos…

Busca en tu interior y descubre cuán emocional fuerte eres, porque no olvides que lo importante no son las fortalezas que tengas sino las que creas que tengas. Porque pensarás, sentirás y sobre todo actuaras en base a tus creencias.