Pamplona 30/08/2014.

“Mi pelo es de viento. Mi piel de arena. Tengo manos de roca, pies de goma cocida, y  ojos de mar.
Me gustan los callos en los dedos, el moreno de obrero y las arrugas de intemperie porque esa es la piel con la que he decidido andar la vida”
Pati Blasco.

No puedo dejar de releer esta cita de Pati Blasco de su último libro Mujer mariposa Mujer tortuga.

Mi trabajo, el de coach, consiste en sacar lo mejor de las personas, desarrollar el potencial que llevan dentro. Pongo toda mi pasión y todo mi conocimiento para que cada individuo elija la piel con la que quiere andar la vida.

¿Quién soy yo? ¿Quién quiero ser? Si el dinero no fuera importante… ¿A qué me dedicaría?

Vivimos tan condicionados por la sociedad, por las nuevas tecnologías. Ya nadie dedica tiempo a mirar un paisaje, a pensar, a sentir, a reír al viento. Si tenemos dos minutos de espera en cualquier sitio sacamos el móvil y nos conectamos, aunque yo diría que nos desconectamos de lo realmente importante. Así nuestra mente está ocupada, qué más da quién sea yo y quién quiera ser. Parece más importante dedicar nuestro tiempo a vivir vidas virtuales, ajenas, que buscar en nuestro interior, conectar con nuestra esencia y tomar consciencia de quiénes somos y de quien nos gustaría ser. Pero como ya he dicho en otras ocasiones para eso a que ser valiente.

¡Leer!. Me encanta leer a Pati porque nos habla de autenticidad, de libertad, de elegir, de piel, de sudor, de monte, de vida…
Me encanta tener un libro entre mis manos que me ayude a conectar con mi esencia, con lo más profundo de mí. Me gusta saber que yo también he elegido la piel con la que quiero andar la vida. Y eso, queridos amigos no tiene precio.

Me quedan pocos meses para instalar la versión 4.4. La 4.3, no ha estado mal, me ha gustado. Peo ahora sé que mi piel está cambiando, tiene más vida, más experiencia, más risa, (eso refleja mi rostro), más ternura, más libertad. Me siento más “yo” que nunca.
Una vez más se quién soy, pero sobre todo se quién quiero ser. Quiero ser la persona que te acompañe en el camino, la persona que esté cerca de ti cuando decidas quien quieres ser realmente. La persona que te proporcione las herramientas para conseguirlo.

No quiero ser yo la que te diga a lo que te tienes que dedicar, la persona que debes ser. La piel que debes vestir. Tan sólo, a través del coaching, quiero acompañarte a descubrirlo. Quiero estar ahí cuando instales tu mejor versión, esa que elijas sin barreras, sin condiciones, sin prisas…esa versión que te ilumine la cara, que te agrande el corazón, que te haga reír a carcajadas, esa que esté fuera de todo pronóstico, fuera de incomodos clichés, esa que te haga libre, única. Esa que hayas elegido tú. Esa que te llene de vida.

Porque si existe la felicidad debe ser algo parecido a lo que se siente al elegir la piel con la que quieres andar la vida.